Por quinto año consecutivo, el pasado sábado volví a disputar el Cros de Torredembarra. Esta carrera se ha convertido para mí en un clásico del mes de agosto y este año tampoco me la quise perder. Y eso que en esta ocasión coincidió con la Cursa de l'Espluga de Francolí, otra de las clásicas del verano. Una lástima no poder estar en las dos carreras este año, pero al final por cercanía, comodidad y porque tengo una especie de espinita clavada con el Cros me decidí por este. La espinita de la que hablo es simplemente poder subir al podio algún año. Es una carrera de cierto nivel pero no demasiado masificada, así que depende de quien corra se puede pensar en aspirar a algo más. Ya os anticipo que este año tampoco pudo ser, pero terminé con la satisfacción de haber corrido mejor que nunca en Torredembarra.
La carrera no empezaba hasta las ocho y media de la tarde pero Arancha, Iker y yo llegamos con algo más de una hora de antelación. Así, aprovechamos para ver algunas de las carreras de las diferentes categorías que había, que fueron muchas. En la de veteranos corrió Alfons, al que estuve animando durante dos vueltas y durante la tercera le acompañé corriendo unos metros. Hice un buen calentamiento y me sentí relativamente bien, aunque era consciente que me tocaría sufrir. Por muy corta que sea esta carrera (de algo más de 5 kilómetros y medio) le tengo un gran respeto. Es una carrera dura (muy dura), con muchos giros de 180º (doce para ser exactos) y con varias subidas y bajadas que a pesar de no ser importantes se hacen incómodas y parten un poco el ritmo.
Conociendo todas estas cosas, me planté en la línea de salida con la intención de no volverme loco. Iba con la idea de salir fuerte aprovechando la ligera bajada de los primeros metros pero sin forzar más de la cuenta ya que tenía alguna que otra experiencia desagradable por ese motivo. Y así lo hice. Salí rápido (ahora, viendo el resultado del primer kilómetro, quizás demasiado rápido) y me coloqué en la cabeza de carrera junto con otros cinco corredores más. Sabía que iba fuerte pero las sensaciones no eran del todo malas y hasta soñé, sin ser consciente del ritmo que llevaba, con poder mantenerlo durante toda la carrera. Iluso de mí. Aunque me pese, correr a 3'15"/km como hicimos durante el primer kilómetro no es para mí, por lo menos ahora mismo. Estoy muy lejos de poder mantener ese ritmo durante varios kilómetros aunque tampoco me centro en eso en mis entrenos. El caso es que pasado ese primer kilómetro, donde aún estaba con los de delante, empecé a aflojar. Tanto, que además de perder al primer grupo me adelantaron dos corredores más, terminando la primera de las cuatro vueltas en octava posición. Lo de los cinco primeros entraba en mis planes pero admito que me dolió perder esas dos posiciones más. Fue quizás ese mi peor momento de la carrera. Pero como casi siempre, después de ese pequeño bajón físico como consecuencia de empezar demasiado fuerte (cuando aprenderé...) me fui estabilizando e hice los dos siguientes kilómetros a poco más de 3'35"/km, algo mucho más acorde con mi estado actual y que me valió para recuperar una posición en la segunda vuelta y a acercarme un poco más al sexto clasificado, que poco a poco fue aflojando. Recuperé la sexta plaza al principio de la tercera vuelta a pesar de un pequeño bajón del ritmo durante el cuarto kilómetro (lo pasé a 3'44"). De esta manera, inicié la última de las cuatro vueltas en sexta posición y con algo de ventaja respecto a mi perseguidor inmediato. Por lo que pudiera pasar no quería dormirme y durante ese último kilómetro y medio recuperé algo de ritmo volviendo a correr rondando los 3'30"/km. En cada giro veía que iba ganando algo de distancia con mis perseguidores, así que esos últimos metros corrí, dentro de la agonía que suponen este tipo de carreras tan cortas, tranquilo y seguro de que el sexto puesto no se me iba a escapar.
Y finalmente así fue. Terminé sexto con un tiempo oficial de 19'00" (no hay resultados colgados en internet) a 1'20" del primer clasificado, que aunque parezca poca cosa es un mundo. El podio tendrá que esperar y si para conseguirlo tengo que rebajar mi tiempo en más de un minuto lo veo realmente complicado. El año que viene volveré a intentarlo...
La verdad es que, en líneas generales, terminé muy satisfecho con la carrera que hice. Puede que me equivocara un poco saliendo tan rápido y como es lógico lo pagué, pero creo que hice una buena carrera consiguiendo el mejor resultado de mis cinco participaciones hasta la fecha. Además, estamos en lo de siempre, mi entrenamiento no está planificado para carreras así de explosivas, así que no puedo esperar milagros.
Para terminar, y antes de las fotos, como siempre quiero agradecer a todos mis compañeros de la Policia Local y del Ayuntamiento por sus ánimos durante la carrera. Creo que cada año lo digo, pero es un gusto correr en Torredembarra (a pesar de esos 19 minutos agónicos).
Ahora sí, os dejo algunas de las fotos que hizo Arancha durante y después de la carrera (con Alfons y los "peques") y los detalles del Garmin. Próxima parada, este mismo sábado por la tarde en el Skoda Triathlon Series de Tarragona, donde haré la distancia olímpica.
La carrera no empezaba hasta las ocho y media de la tarde pero Arancha, Iker y yo llegamos con algo más de una hora de antelación. Así, aprovechamos para ver algunas de las carreras de las diferentes categorías que había, que fueron muchas. En la de veteranos corrió Alfons, al que estuve animando durante dos vueltas y durante la tercera le acompañé corriendo unos metros. Hice un buen calentamiento y me sentí relativamente bien, aunque era consciente que me tocaría sufrir. Por muy corta que sea esta carrera (de algo más de 5 kilómetros y medio) le tengo un gran respeto. Es una carrera dura (muy dura), con muchos giros de 180º (doce para ser exactos) y con varias subidas y bajadas que a pesar de no ser importantes se hacen incómodas y parten un poco el ritmo.
Conociendo todas estas cosas, me planté en la línea de salida con la intención de no volverme loco. Iba con la idea de salir fuerte aprovechando la ligera bajada de los primeros metros pero sin forzar más de la cuenta ya que tenía alguna que otra experiencia desagradable por ese motivo. Y así lo hice. Salí rápido (ahora, viendo el resultado del primer kilómetro, quizás demasiado rápido) y me coloqué en la cabeza de carrera junto con otros cinco corredores más. Sabía que iba fuerte pero las sensaciones no eran del todo malas y hasta soñé, sin ser consciente del ritmo que llevaba, con poder mantenerlo durante toda la carrera. Iluso de mí. Aunque me pese, correr a 3'15"/km como hicimos durante el primer kilómetro no es para mí, por lo menos ahora mismo. Estoy muy lejos de poder mantener ese ritmo durante varios kilómetros aunque tampoco me centro en eso en mis entrenos. El caso es que pasado ese primer kilómetro, donde aún estaba con los de delante, empecé a aflojar. Tanto, que además de perder al primer grupo me adelantaron dos corredores más, terminando la primera de las cuatro vueltas en octava posición. Lo de los cinco primeros entraba en mis planes pero admito que me dolió perder esas dos posiciones más. Fue quizás ese mi peor momento de la carrera. Pero como casi siempre, después de ese pequeño bajón físico como consecuencia de empezar demasiado fuerte (cuando aprenderé...) me fui estabilizando e hice los dos siguientes kilómetros a poco más de 3'35"/km, algo mucho más acorde con mi estado actual y que me valió para recuperar una posición en la segunda vuelta y a acercarme un poco más al sexto clasificado, que poco a poco fue aflojando. Recuperé la sexta plaza al principio de la tercera vuelta a pesar de un pequeño bajón del ritmo durante el cuarto kilómetro (lo pasé a 3'44"). De esta manera, inicié la última de las cuatro vueltas en sexta posición y con algo de ventaja respecto a mi perseguidor inmediato. Por lo que pudiera pasar no quería dormirme y durante ese último kilómetro y medio recuperé algo de ritmo volviendo a correr rondando los 3'30"/km. En cada giro veía que iba ganando algo de distancia con mis perseguidores, así que esos últimos metros corrí, dentro de la agonía que suponen este tipo de carreras tan cortas, tranquilo y seguro de que el sexto puesto no se me iba a escapar.
Y finalmente así fue. Terminé sexto con un tiempo oficial de 19'00" (no hay resultados colgados en internet) a 1'20" del primer clasificado, que aunque parezca poca cosa es un mundo. El podio tendrá que esperar y si para conseguirlo tengo que rebajar mi tiempo en más de un minuto lo veo realmente complicado. El año que viene volveré a intentarlo...
La verdad es que, en líneas generales, terminé muy satisfecho con la carrera que hice. Puede que me equivocara un poco saliendo tan rápido y como es lógico lo pagué, pero creo que hice una buena carrera consiguiendo el mejor resultado de mis cinco participaciones hasta la fecha. Además, estamos en lo de siempre, mi entrenamiento no está planificado para carreras así de explosivas, así que no puedo esperar milagros.
Para terminar, y antes de las fotos, como siempre quiero agradecer a todos mis compañeros de la Policia Local y del Ayuntamiento por sus ánimos durante la carrera. Creo que cada año lo digo, pero es un gusto correr en Torredembarra (a pesar de esos 19 minutos agónicos).
Ahora sí, os dejo algunas de las fotos que hizo Arancha durante y después de la carrera (con Alfons y los "peques") y los detalles del Garmin. Próxima parada, este mismo sábado por la tarde en el Skoda Triathlon Series de Tarragona, donde haré la distancia olímpica.
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