miércoles, 26 de septiembre de 2012

El Sailfish Half Triatló de Berga en el Vallenc

Hoy dejo una pequeña crónica del Half de Berga que salió publicada en el Setmanari "El Vallenc" el pasado viernes 21 de septiembre. Siempre es bonito salir en los diarios por algo positivo. Muchas gracias al club por hacerlo posible y en especial a Joan Carles, que es quien siempre se preocupa de mandarlo.


martes, 25 de septiembre de 2012

Crónica XV Triatló popular de Tarragona

Justo una semana después del Sailfish Half Triatló Berga, el domingo volví a la competición en el XV Triatló Popular de Tarragona. Me hacía gracia volver a participar en esta carrera dos años después de mi debut en triatlón. En aquella ocasión (recuerdo que me encontraba metido de lleno en la preparación para mi primer maratón) disfruté a ratos y lo terminé de milagro. Sin ninguna preparación en el agua y con una bicicleta hecha polvo me planté en la línea de salida con la intención de tener una primera aproximación en esto del triatlón. A decir verdad, después de la experiencia que tuve en el agua, no sé como me quedaron ganas de seguir intentándolo. A pesar de eso, en líneas generales, me gustó y supe que esto era lo que quería hacer, aunque lo veía todo muy lejano y muy complicado, tanto a nivel de entrenamientos como, sobre todo, a nivel de material. Sería curioso comparar las imágenes de aquel día con las de este domingo para ver la evolución. Todo se andará...

Pero volvamos a la actualidad y a la carrera del domingo. Esta vez llegaba un poco más preparado en todos los sentidos a la cita. Dos años han dado para mucho más de lo que nunca me hubiera podido imaginar. Era un día feo, con el cielo amenazando lluvia. Al llegar a la salida, veo a mucha gente inscrita. Somos algo más de 200 y me parecen demasiados si atendemos a la capacidad de la organización. Enseguida dejo en boxes la bici y el resto de material y me voy a la playa. Echando un vistazo al supuesto recorrido de natación (a pocos minutos de empezar nadie tiene del todo claro cual es) se podía ver claramente que aquello no eran 300 metros, sino bastantes más. Me coloco relativamente adelantado para intentar evitar posibles golpes pero ni así. Al dar la salida mucha gente sale a por todas y me pasan por encima. Vaya prisas! Recibo más golpes en este triatlón que en cualquiera de los que he hecho hasta ahora. Pero eso no es lo peor. La gente pasa de las boyas que marcan el circuito y giran cuando les parece sin respetar nada ni a nadie. Vergonzoso. Si llega a ser una carrera de la federación los jueces no hubieran dado abasto descalificando a gente. En ese sentido me quejo de la actitud de algunos participantes más que de la organización, que se vio superada. En la conciencia de cada uno queda.

Salgo del agua alrededor de los 10’ habiendo nadado una distancia, según mi Garmin, de unos 570 metros. Por delante una transición larguísima. Tenemos que subir desde la playa por unas pasarelas sin alfombra y con un cemento rugoso que me destroza los pies, en especial los talones. Llego a la bici dolorido pero hago una transición rápida. Mientras me estoy preparando pasa por mi lado Eric, que me ha sacado en el agua cierta ventaja. Comienza el sector bici (en este caso btt). No me siento muy fino y, tan acostumbrado últimamente a la bici de carretera, noto una gran diferencia entre una y otra. Me siento lento y pesado. Aún así, intento coger un buen ritmo desde el principio y voy ganando alguna posición antes de entrar en el camino del río. Enseguida me alcanza Guillem, con el que comparto casi todo el recorrido. Es un circuito bonito a ratos por la zona del Puente del Diablo y con alguna que otra dificultad técnica. Durante estos 22 km de bici paso por diferentes estados. A ratos me siento muy bien, otros bastante cansado e incapaz a mantener el ritmo de los de delante, otros momentos “me voy” de la carrera y me limito a rodar... Y un comentario que quiero añadir. Quizás son cosas mías y esté equivocado, pero me quedé con la sensación de que no todos hicimos el mismo recorrido. Paralelamente a nuestra carrera había organizada otra marcha en btt y en el camino había muchas marcas que te hacían dudar. Además, no era fiable seguir al de delante porque podía ser perfectamente de la otra carrera ya que había muchos tramos en común. En conjunto, un desastre. 

Los últimos kilómetros en bici, ya de vuelta a boxes, los hacemos en un grupo que va bastante rápido. Somos ocho creo. Ya en la última recta decido apretar, tirar del grupo y colocarme el primero (seguido por Guillem) para entrar lo mejor posible en boxes. Vuelvo a hacer una transición rápida y a correr. Como es habitual, es donde mejor me siento. En teoría son 4 kilómetros muy llanos así que decido ir fuerte pero sin cometer locuras. Paso el primer kilómetro en 3’40”, lo que me sirve para ganar bastantes posiciones. Antes del segundo kilómetros ya giramos por lo que, de 4 km, nada de nada. Sería incluso más corto. Muy malo para mí. Sigo a lo mío y los dos siguientes kilómetros los hago alrededor de 3’50”. Ya estoy llegando y decido aumentar el ritmo para terminar los 3,58 km de carrera a pie en 13’31”. Al final, llego a meta con un tiempo de 1h29’24” en la posición 25º (12º de mi categoría) con buenas sensaciones aunque con dudas sobre la fiabilidad de esta clasificación. Aún así, eso es lo de menos. Lo importante es que terminé bien, no sufrí ninguna caída en bici (hubo un participante que se hizo mucho daño) y volví a disfrutar corriendo a ritmos altos.

Aparte de eso, desde aquí felicitar a Eric por la victoria que consiguió en su categoría. Después de no conseguir lo que se propuso en Berga, esta fue, sin duda, una buena manera de despedir su temporada de triatlón. Muchas felicidades crack!

Ahora, como siempre, las imágenes de mi fotógrafa personal y los datos del Garmin con los detalles de la carrera:

 
 





lunes, 24 de septiembre de 2012

Primera semana post-Berga

Ya ha pasado una semana desde el half de Berga y aunque aún me siento algo cansado, creo que mi recuperación ha sido buena ya que no han aparecido molestias a la hora de volver a entrenar y competir. Es para estar (o seguir) contento y satisfecho. La verdad es que esta semana he ido por libre y hecho lo que me ha parecido. He aprovechado para pasar un poco (pero sólo un poco) de la dieta y darme algún capricho, he entrenado lo que me ha apetecido (lo mejor es que me sigue apeteciendo) y hasta he vuelto a competir rindiendo más o menos bien en una carrera un poco complicada. Así que, en líneas generales, ha sido una buena semana de recuperación después de, sin ninguna duda, la competición más importante para mí este año.

Ahora se me plantea la duda de qué hacer. ¿Hacia donde tiro en estos momentos? Hace meses tenía la idea de correr el maratón de Castellón el 9 de diciembre pero, sinceramente, ahora mismo me da pereza empezar a hacer tantos kilómetros a pie y dejar un poco de lado la bici y la natación. Siendo sincero, ni me apetece ni creo que sea lo más adecuado ahora dedicarme exclusivamente a correr. Primero, porque es evidente que la carrera a pie es lo que más desgasta y a pesar de no llevar muchísimos kilómetros este año, no quiero forzar más de la cuenta. Y segundo,  porque conociendo mis virtudes y mis carencias, creo que ahora es el momento de entrenar con calma y con tiempo por delante la natación. Es donde necesito mejorar y quiero intentar lo que sea para hacerlo. De todas formas, no me olvido que por delante tengo la Behobia – San Sebastián el 11 de noviembre y que después espero hacer algún que otro medio maratón, como por ejemplo, el de Tarragona.

La conclusión a la que llego, por tanto, es que voy a seguir entrenando un poco de todo hasta final de año con la intención de mantener la forma pero sin quemarme más de la cuenta y descansando cuando el cuerpo lo pida. Toca ser prudente para empezar el 2013 lo más fresco posible y con una buena base para asaltar el nuevo objetivo, que no es otro que el triatlón de larga distancia.

Esa es mi idea. Sólo espero no lesionarme ya que en los últimos dos años, las únicas lesiones que he tenido, casualmente o no, han sido en los meses de octubre y noviembre. Esperemos romper el gafe este año...

Y en cuanto al resumen de entrenamiento semanal, a lo tonto me han salido algo más de 9 horas aunque en general ha sido todo a ritmos muy suaves (excepto la competición del domingo):

Lunes.- Día post-competición que Arancha y yo aprovechamos para pasarlo en Barcelona y “disfrutar” de un regalo que tenía pendiente desde febrero: un masaje deportivo de 85’ en el centro FITT de la C. Balmes. Me hicieron bastante daño pero me gustó la experiencia. Además, la fisio me encontró muy bien a nivel muscular y tampoco observó ningún problema en las rodillas que tan preocupado me tienen en general.


Martes.- 60’ de elíptica + 30’ de estiramientos, ejercicios de propiocepción, abdominales y lumbares. Para terminar, 1.600 m de natación suave haciendo técnica.

Miércoles.- Salida en btt de 1h37’32” para hacer 28,02 km. Para variar, hubo un rato que me perdí pero en general fue bien de cara a la carrera del domingo.

Jueves.- Rodaje de 53’29” para hacer 11,31 km (4’44”/km). Este fue el entrenamiento donde más cansado me noté. Además, salí nada más comer y no fui del todo cómodo.

Viernes.- 1.500 m de natación suave en 30’37” y luego 5’-10’ de trote en el agua con Arancha.

Sábado.- Salida de 1h30’07” (42,92 km) en bici de carretera y 36’04” (13,77 km) en btt.

Domingo.- Dos años después de debutar en triatlón en esta misma competición, volví a participar en el Triatló Popular de Tarragona (300m/20km/4km). Actuación decente y tiempo de 1h29’24”, quedando el 25º de la general y el 12º de mi categoría de unos 200 participantes. Queda pendiente la crónica de una carrera un tanto extraña. 

viernes, 21 de septiembre de 2012

Más cosas sobre el Sailfish Berga

Hoy dejo un par de cosas más sobre el Sailfish Berga. La primera, el video de llegada a meta que puede descargarse desde la web de corriendovoy.


Y segundo, el diploma de finisher escaneado.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Crónica Sailfish Half Triatló Berga (2012)

Antes de empezar con mi crónica, me gustaría mandar un mensaje de ánimo a los familiares, amigos y compañeros del triatleta que falleció el domingo en el Sailfish Half Triatló Berga a los pocos minutos de iniciar la natación. La verdad, un palo muy duro para todos y que empañó un poco la gran fiesta que debería haber sido el evento. Supongo que la gran mayoría de los que estábamos no nos enteramos de nada hasta el final. Una lástima que pasen cosas así. Son hechos inexplicables que le hacen a uno recapacitar sobre muchas cosas, pero sobre todo creo que nos enseñan a valorar lo que es la vida y a darle la importancia justa a cada "problema" que pensamos que tenemos en nuestro día a día y que en realidad son nada en comparación con lo realmente importante. Desde aquí y aunque ya no haya solución ni sirva de nada, un abrazo a todas las personas afectadas por esta gran pérdida. Descansa en paz, Daniel.

Ahora sí, vamos con la crónica del Sailfish Half Triatló Berga que hay mucho que contar. En primer lugar tengo que decir que si me quedaba alguna duda antes del domingo, en Berga pude volver a sentir que lo mío es la media (y quien sabe si la larga) distancia. Es en este tipo de triatlones donde me da tiempo de recuperar corriendo lo que pierdo nadando. Y el domingo perdí mucho nadando, más de lo que cabía esperar. Tenía como referencia el año pasado y mi tiempo cercano a los 32', pero fallé de forma clamorosa. No tuve (ni yo, ni ninguna persona con la que hablé del tema) una salida de natación fácil. Salimos desde dentro del agua y ya antes de empezar se intuía que se formaría una buena. Hubo muchos golpes, agarrones, gente que en lugar de adelantarte por un lado pretende pasarte por encima,... aún así, pasados esos primeros instantes de agobio en el que cada uno busca su sitio, fue una natación relativamente cómoda. Hice la primera recta sin desviarme demasiado pero a partir del primer giro la cosa cambió. Busqué tanto espacio para poder nadar tranquilo que me desvié. Perdí de vista las boyas y a los nadadores por un rato. Y lo mismo me pasó en el último giro. Además, en ese último giro tomé como referencia unas boyas que no eran y tuve que rectificar hacia la izquierda para salir del agua en más de 38 minutos y, según el Garmin, con 2.200 metros nadados (aquí se me ocurren cuatro cosas: o el circuito estaba muy mal medido, o mi reloj calcula lo que le da la gana, o me desvié de forma exagerada o, simplemente, un poco de todo). Salí muy desmotivado, para que nos vamos a engañar. Y lo que era peor, me sentía mareado y sin demasiadas fuerzas. La cosa no prometía mucho en esos momentos... Mal empezamos!

La transición no me fue mal. Ya llevaba puestas las medias compresivas desde la natación y llegué a mi bici con el neopreno casi quitado. Eso creo que sí lo mejoré respecto al año pasado y al Half de Calella de finales de mayo. En pocos minutos ya estaba encima de la bici dispuesto a empezar a sumar kilómetros lo más rápido posible. Como decía, salí del agua muy flojo, como sin energía, y los dos primeros kilómetros del recorrido de bici (con un desnivel importante) no ayudaron mucho. Sabía que me encontraría con ellos pero igualmente se me hicieron duros. Pasados éstos, llegaba un buen tramo de bajada. En ese momento empecé a coger ritmo y, para mi sorpresa, a ganar varias posiciones. Eso me ayudó a coger un poco de confianza. Cuando llevaba poco más de una hora y cuarto de competición decidí comerme la primera barrita. A esas alturas ya me sentía mejor físicamente y había cogido algo de moral viendo que, poco a poco pero de forma contínua, había ido ganando posiciones. Empecé entonces a darle vueltas a la cabeza, a hacer cálculos de lo que debía hacer para cumplir con lo que me había propuesto y bajar de las cinco horas. Sabía que no sería fácil y que no tenía demasiado margen de error. Al final, confiando que la carrera a pie me iría bien, pensé que llegando a la T2 un poco antes de las 3h25' podría conseguirlo. Apenas sin darme cuenta, ya había dado la primera vuelta al recorrido. Llevaba una velocidad media de algo más de 32 km/h. Sólo faltaba una vuelta y, según mis cálculos, la cosa no estaba nada clara. Si lograba llegar antes del tiempo previsto, sería por muy poco. Así que, no quedaba otro remedio que apretar. Dar todo lo que pudiera y así lo hice. Gran segunda vuelta y gracias a ella llegué a la T2 sobre las 3h21' de carrera.

Segunda transición muy rápida. En poco más de un minuto ya estaba corriendo. Empezaba lo bueno (y yo sin saberlo). Enseguida cogí un ritmo alto entorno a los 4'10"/km. Iba cómodo de piernas pero a pesar de no haber comido ni bebido demasiado en la bici (sólo tres barritas y un bidón de 226ERS de 800 ml) me sentía algo pesado. Por suerte, a los pocos minutos esa sensación desapareció. Cada vez me fui sintiendo mejor. A pesar de los kilómetros y de las contínuas subidas y bajadas del recorrido mi ritmo no se resintió demasiado en toda la carrera, cosa que aproveché para ganar muchísimas posiciones. Iba eufórico y sin miedo a una "pájara". Tanto que durante toda la carrera a pie no comí nada y apenas bebí dos vasos de Powerade. Ahora sí, por fin, lo vi claro. Manteniendo ese ritmo sería sub' 5h, además con bastante margen de tiempo. Después de no empezar nada bien el día, llegó la hora de disfrutar sabiendo que lo iba a conseguir. La tercera vuelta, lejos de aflojar o relajarme y a pesar del cansancio acumulado, la hice prácticamente al mismo ritmo que la segunda pero, además, con una sonrisa en la cara. En esos momentos, por mi cabeza pasó todo el trabajo que había tenido que hacer para llegar aquí. Pensé en las horas invertidas, en los sacrificios y, para que nos vamos a engañar, también me dije a mí mismo que si lo había conseguido era porque me lo merecía.Ya se sabe, el trabajo bien hecho siempre, o casi siempre, tiene su recompensa.

Así, entre tanto pensamiento, la última vuelta se me pasó volando y enseguida me planté en la alfombra que me informaba que apenas me quedaban por recorrer los últimos cien metros. Recogí la última pulsera y aumenté el ritmo para acabar entrando a meta en 4 horas, 48 minutos y 46 segundos, muy feliz por haber logrado lo que me había propuesto y especialmente satisfecho con la carrera a pie que había hecho. Estos fueron mis parciales y la clasificación:

RUBEN OTERO VIÑALS (posición 50/500 llegados a meta)
Swim: 38'28" (205º)
Bike: 2h43'13" (58º)
Run: 1h27'05" (35º)
Tiempo final: 4h48'46"

Con este resultado, consigo rebajar en casi doce minutos la anterior mejor marca en un triatlón de media distancia (justamente lograda en Berga el año pasado) y es la primera que consigo en este 2012. Ya lo he dicho antes, pero a pesar de haber "patinado" en el agua, terminé muy satisfecho con el papel que hice en general.

En cuanto a la carrera en sí (organización, voluntarios, público,...) creo que se pueden poner pocas "pegas". Quizás la pasta party se podría mejorar un poco pero por lo demás todo muy bien. Sin ninguna duda, una gran competición a la que tengo mucho cariño y a la que volveré siempre que pueda.

Y sobre los agradecimientos que suelo hacer cuando termino una carrera importante, no me voy a enrollar como otras veces. La gente que me sigue, que se interesa por lo que hago, que me apoya, que me ayuda,... ya sabe de sobra lo importantes que son para mí y lo que les agradezco todos esos detalles. Muchas gracias a todos!

Ya termino. Sólo falta dejaros el gran reportaje fotográfico que hizo Arancha y los datos del Garmin. Como hay mucho material, es posible que en los próximos días siga colgando alguna que otra cosa. Espero no hacerme pesado...












Llegada a  meta


Foto con Eric

Foto con Dolça Ollé, 2ª clasificada femenina

Foto con el gran Marcel Zamora


Con Arancha
El colofón a un gran día. En el sorteo me tocó un polar RCX5 Tour de France, qué suerte!
Ahora los resultados del Garmin:






sábado, 15 de septiembre de 2012

Semana 14/14: Llegó el momento

Ya está todo preparado. En unas horas estaré compitiendo en Berga y cerraré otra etapa de mi vida deportiva. Me apetece mucho volver a esta competición y me apetece mucho escribir otra gran página, como también me apetecerá una vez haya terminado de competir, poder descansar un poco, dejar de estar tan atado a un plan de entrenamiento durante algunas semanas, desconectar, competir cuando me apetezca, recargar pilas y volver en poco tiempo con más ganas que nunca con la intención de perseguir nuevos y grandes objetivos (que ya tengo en mente, por cierto) de cara a 2013. Antes de empezar a resumir mi última semana de entrenamientos y dar por concluido este período, me gustaría decir que durante estas catorce semanas en las que he estado preparando el Half he disfrutado como nunca entrenando. Por eso, como dije en la entrada de ayer, pase lo que pase en Berga, consiga o no lo propuesto, todo lo que he hecho y vivido hasta llegar aquí ya no me lo puede quitar nadie y habrá merecido la pena. Os lo aseguro.

Ahora sí, toca cerrar esta etapa resumiendo mi última semana de entrenamientos:

Lunes.- 1h55'54" de bici para 58,97 km, haciendo un recorrido con fuerte desnivel durante los primeros 23 kilómetros y de ahí hasta el final perfecto para rodar muy rápido. Terminé a 30,5 km/h de media y sintiéndome bastante bien. Después, 2.000 m de natación suave en 39'26".

Martes.- Descanso.

Miércoles.- Entrenamiento muy desagradable en la pista de atletismo con mucho viento. A pesar de las incomodidades, 20' de rodaje para calentar + 6x600 rec. 3' + 10' de enfriamiento. En total, con descansos incluidos, 10,70 km en 1h00'30". Este fue el ritmo que llevé en las series (en azul): 


Jueves.- Creo que ha sido el único entrenamiento que me he "saltado" en toda la preparación, aunque sólo fue parcialmente. Tenía previsto 30' de bicicleta estática + 15' de rodaje a pie y series de abdominales y lumbares. Pues bien, la cosa quedó en 30' de bici en el gimnasio (11,60 km) ya que al terminar, todas las cintas de correr estaban ocupadas. Opté por salir a la pista de atletismo para hacer el rodaje pero hacía mucho viento (fresquito) y yo estaba empapado de sudor, así que decidí que esos 15' de rodaje no me iban a suponer ningún beneficio notable y, en cambio, podrían darme algún susto en forma de resfriado... De paso y ya puestos, también me salté las series de abdominales y lumbares... Un día es un día.

Viernes.- Descanso y como viene siendo habitual antes de estas "grandes citas", tarde de relax en el Aquum y pasta party en el restaurante La Madolina.

Sábado.- Salida muy suave en bici de 31'48" a primera hora de la mañana para 14,58 km (27,5 km/h de media) y viaje hacia Berga.

Domingo.- Sailfish Half Triatló Berga... La semana que viene la crónica, las fotos y todo lo que considere importante destacar. Buena suerte a tod@s los que vayais a competir!

viernes, 14 de septiembre de 2012

Sailfish Half Triatló Berga (La Previa)

Bueno, pues aquí estamos otra vez. De nuevo a menos de 48 horas para una gran competición como es la segunda edición del Sailfish Half Berga y de nuevo ante un gran reto. Esta vez el objetivo no es otro que ser sub’5 horas. Creo que es un objetivo bastante realista partiendo de la base que el año pasado, en realidad, ya rebajé ese tiempo aunque cruzara la meta en 5 horas y 23 segundos. La razón de esos segundos de más (hubo casi un minuto de diferencia) fue haber tardado un poco en tirarme al agua y que no había alfombra justo en la salida. Pero eso ya es pasado y ahora toca mirar hacia el futuro. Y el futuro pasa por este próximo domingo.

La verdad es que tengo muchas ganas. Ganas de disfrutar, ganas de hacerlo bien, ganas de superarme, ganas de volver a sentir esas sensaciones que sólo te dan este tipo de competiciones, y ganas de volver a un sitio donde el año pasado fui feliz, muy feliz.

Creo que la competición en sí será muy parecida a la del año pasado aunque parece que el tramo de carrera a pie será un poco más llano. El año pasado tuvo unos 200 metros de desnivel positivo y este año lo han intentado suavizar. También es verdad que según mi GPS el recorrido de tres vueltas no llegaba a los 21 km (se quedó cerca de los 20) y una cosa compensó a la otra. Vamos a ver en que queda este año, pero seguro que será divertido...

Mis expectativas este año, como ya he dicho, son las de bajar de cinco horas. Para ello tengo que hacer buenos parciales en todos los sectores, empezando por la natación donde el año pasado hice un tiempo que rondaba los 32 minutos. En mi vida he nadado tan rápido como ese día. No sé que distancia real nadé pero hice un parcial que no me hubiera esperado nunca para 1.900 metros. En este aspecto, este año me conformo con repetir ese mismo tiempo, ya que no considero que mi mejora en el agua haya sido demasiado notable de un año para el otro. Más bien al contrario. Personalmente, me siento estancado y creo que algo falla. No sé si es mi técnica, no sé si me faltan horas de entreno... El caso es que ahora mismo firmo ese tiempo con los ojos cerrados.

Donde sí espero estar más rápido es en el resto de carrera, empezando por las transiciones, donde sobre todo en la primera, no soy nada rápido. En estas competiciones “largas” tampoco es cuestión de ir como un loco y pagarlo luego por cualquier descuido, pero sí quiero ir un poco más rápido que de costumbre, llegar a mi sitio con el neopreno casi fuera, llevar las medias compresivas ya puestas en la natación, no ponerme el pulsómetro en el pecho... Son segundos que intentaré arañar al crono y que al final pueden tener su peso en oro para conseguir o no el objetivo que me he marcado.

En la bicicleta y en la carrera a pie, simplemente, espero hacerlo mejor que el año pasado. En bici sí que noto cierta mejoría, conozco el circuito (me gusta y creo que me viene bien) e intentaré dar lo máximo que pueda, siempre pensando en que después aún faltan 21km corriendo, pero dando un poco más de lo habitual. Y corriendo, la verdad es que llevo unos meses estando mejor que nunca, aunque hay que tener en cuenta que la referencia son carreras que no han superado los 10km. Eso sí, a diferencia de Calella, esta vez he entrenado más, he hecho alguna tirada larga, he hecho subidas, series cortas, series más largas... sin duda, llego mejor preparado.

Como siempre digo, habrá que tener un poco de suerte en los detalles que uno no puede controlar. Suerte para no pinchar, para no caerse, para no lesionarse y para evitar mil cosas que pueden pasar en competiciones así. También me preocupa últimamente, hasta cierto punto claro, llegar un poco pasado de entrenamientos. Espero no pagarlo, pero si lo pago tampoco me supondrá ningún trauma, porque hasta llegar aquí, he disfrutado muchísimo entrenando, sobre todo encima de la bicicleta.

Para terminar, vuelvo a tener dudas de si correr con las Noosa o no. En Calella me fueron bien pero acabé con un ligero dolor en la planta del pie. Estoy acostumbrado a entrenar con zapatillas con más amortiguación y lo noté. Sinceramente, no sé aún que decidiré.

Lo que sí que tengo claro es que voy a usar para hidratarme y que voy a comer. Hace unos días escribí una entrada hablando de los productos Victory Endurance y 226ERS. Pues al final, decisión salomónica. Beberé Energy Drink de Mandarina de 226ERS y para comer usaré las barritas Nature’s Energy Bar de Victory Endurance. Además de eso, también intentaré tomar fruta y bebida isotónica que den en los avituallamientos. Así, intentaré evitar todo lo que pueda los geles. Esa es la intención pero decidiré sobre la marcha.

Pues nada más. De momento las cosas están así. Mañana, bien pronto, último rodaje en bici y viaje a Berga para dejarlo todo a punto lo antes posible y disfrutar de un, esperemos, gran fin de semana.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Semana 13/14: Con los deberes hechos

Ya casi estamos. Penúltima semana de entrenamientos antes del Half de Berga y aunque es verdad que me siento algo cansado (ya sé que lo he dicho antes en alguna otra entrada), creo que la cosa pinta bien. Es más, no lo creo, estoy convencido de ello. Durante esta semana he acumulado unas doce horas y media más de entrenamiento para sumar 6.700m+235km+23,5km. No está mal para ser la semana antes de la competición. Ahora sí, habiendo llegado aquí, ya puedo decir que todo el trabajo físico está listo. Los deberes están hechos y sólo falta entrenar lo justo para la “puesta a punto” y darle tanta o más importancia a esos detalles que siempre pueden ayudar. Como dije en mi anterior entrada, estos días habrá que trabajar el aspecto psicológico y concentrarme en tener todos los pensamientos positivos que pueda. Al margen de eso, intentaré darle todavía una mayor importancia a la alimentación (en ese aspecto, últimamente me estoy empezando a sentir como un bicho raro), dormir alguna que otra hora más y poner todo el material que voy a usar a punto.

En pocas palabras, hoy empieza una semana especial. La verdad, me gustan mucho los días previos a una gran competición. Es una situación en la que se mezclan muchos sentimientos, algunos contradictorios entre sí, pero la mayoría agradables. Sientes ilusión, ganas de hacerlo bien, de volver a sentirte, por llamarlo de alguna forma, "especial", de pensar que el trabajo bien hecho tendrá su recompensa, etc. Por contra, también se siente algún tipo de duda o miedo (a pinchazos en la bici, a lesiones,...) que tampoco deben quitarte el sueño porque son parte del juego y, muchas veces, son inevitables. Pero lo más importante a este nivel es ser siempre consciente de por qué estás ahí y lo que debes hacer, que no es otra cosa que disfrutar y vivir otra experiencia inolvidable que te ayude a ser un poco más feliz.

Como unos días antes de la competición intentaré escribir una previa con mis objetivos, últimas sensaciones y de más, no quiero seguir enrollándome en esta entrada, así que vamos con el resumen de la semana y alguna cosilla más:

Lunes.- 21’45” de rodaje a pie para 5,02 km (a 4’20”/km) y 3.000 m de natación (calentamiento, técnica, pull, manoplas, aletas,...) en 1h02’39”.

Martes.- Aprovechando el día de fiesta en el trabajo, salida de 3h00’06” en bici con subida a L’Albiol incluida. En total fueron 85,71 km a una media de 28,6 km/h y un desnivel positivo de casi 2.500 metros.



Fotos desde l'Albiol, a unos 820 msnm
Miércoles.- Vuelta a la pista de atletismo de Campo Claro para hacer un calentamiento de 20’+ 8x800m (rec. 3’) + 10’ de enfriamiento. En total, contando las recuperaciones, fueron 13,91 km en 1h15’55”. Las series las hice a un ritmo alrededor de 3’25”/km teniendo muy buenas sensaciones. Ahí dejo el resumen del entreno:



Jueves.- A mediodía, 2.000 m de natación suave en 41’42”. Por la tarde, 45’ de bicicleta estática en el gimnasio (me salieron 17,75 km) y 15’ trabajando abdominales y lumbares.

Viernes.- Descanso y masaje de descarga en el fisio. Me notó un poco cargado aunque a estas alturas lo extraño hubiera sido lo otro.

Sábado.- Salida en bici de 1h33’05” para hacer 46,91 km. Fui muy tranquilo, quizás demasiado, y sólo apreté un poco al final. Terminé con una media de 30,2 km/h. Después, 30’52” de nado en el mar con neopreno para hacer 1.700 metros sintiéndome bastante cómodo.

Domingo.- Entreno de transición empezando con 2h39’42” de bici intentando rodar lo más llano posible (me salieron 85,54 km a 32,1 km/h y 800 m de desnivel acumulado) y a continuación 19’52” de carrera a pie para 4,57 km (ritmo de 4’21”/km). En la transición sólo tardé 1’45”, con lo cual, fue un entreno bastante “real” de cara a la competición.


Para terminar, quiero decir que he tenido suerte. Y digo esto porque llevaba ya unas semanas con la duda de si cambiar o no las cubiertas de la bici para Berga, y la respuesta (como muestra la foto) ha terminado siendo bastante clara. Para Calella compré unas S-Works y me han ido bien mientras han durado, pero han durado poco, muy poco, sólo unos 2.500 kilómetros. Así acabó la rueda trasera de la bici después del entreno del martes:



Ya están cambiadas por unas Michelin Pro Race 3. A ver cuanto duran estas...

jueves, 6 de septiembre de 2012

La fuerza de la autoconfianza

Ahora que entramos en una fase en la que ya casi todo el trabajo físico está hecho (y bien hecho, creo), es bueno empezar con la preparación psicológica, poner a punto la cabeza, ser consciente de lo que nos vamos a encontrar el día de la carrera, tus posibilidades en ella,... Por eso, el otro día, leyendo este artículo publicado en la web de Eurotri de David Peris Delcampo, Psicólogo del Deporte, que nos habla sobre la autoconfianza, me llamó la atención y lo consideré lo suficientemente importante para compartirlo. Ahí lo dejo:

“Es necesario un buen trabajo para poder rendir al máximo”, me dijo un triatleta (al que llamaremos J) pocos días antes de enfrentarse a una competición para la que se había preparado durante mucho tiempo. Esta frase parece obvia pero, hablando un poco más con J vemos que existe una gran fuerza detrás: “sé que he trabajado bien, el volumen de trabajo y las marcas parciales me muestran que estoy para conseguir aquello que me planteo.” Pero no sólo eso. J había tenido experiencias anteriores positivas en algunos casos y negativas en otros, que supo aprovechar aprendiendo de ellas y encontrando soluciones que le servirán (si es necesario) para competiciones futuras. J se decía a sí mismo y a los demás: “Estoy para hacer una gran competición. Voy a hacer una gran marca”.  

¿En ese momento J gozaba de una buena autoconfianza? Cuando decía que iba a hacer una gran marca, ¿qué es lo que realmente pretendía decir? Las personas que gozan de una buena autoconfianza tienen un plus enorme que les hace rendir al máximo. ¿J tenía autoconfianza? ¿De verdad? Cuando una persona tiene autoconfianza supera las adversidades con eficacia, es capaz de dar su máximo, de tomar decisiones adecuadas, de analizar bien lo que está pasando, de tener pensamientos y lanzarse mensajes que le benefician en su funcionamiento, de exprimirse “con cabeza”.

La autoconfianza es la percepción realista de que, sabiendo lo que realmente sabemos hacer, podemos lograr aquello que nos proponemos. En esta definición hay dos cosas fundamentales: percepción realista y objetivos adecuados. La percepción realista se refiere a que el triatleta (J en este caso) es capaz de ver las cosas como son y, a partir de ahí, hacer aquello que sabe/puede hacer para lograr el objetivo. Y, el objetivo ha de ser realista (obvio) y, además, significar un reto lo suficientemente significativo para que el triatleta “lo persiga” adecuadamente. Las ideas generadas por una fuerte autoconfianza aparecen de manera automática cuando se (en este caso) compite, ya que están muy arraigadas (y trabajadas, consolidadas) en el deportista.

La autoconfianza se logra con hechos, con pensamientos adecuados y con el convencimiento realista (palabra clave y que repetiremos las veces que haga falta), con la creencia basada en evidencias, de que haciendo lo que uno sabe hacer, logrará el objetivo (planteado adecuadamente) que se propone. Es un convencimiento real, una creencia de verdad, fuerte.

Algo muy distinto pero que se puede confundir incluso a veces fácilmente (y que tal vez aparece con demasiada frecuencia), es lo que se llama “falsa autoconfianza”. La falsa autoconfianza ocurre cuando el deportista se “lanza” mensajes, ideas… pretendiendo autoconvencerse de que está bien pero ciertamente no se lo cree. Mensajes del tipo “seguro que lo voy a hacer bien”, “estoy impresionante”, “la lesión no me va a afectar”… si no se está convencido de verdad, perjudican el funcionamiento por ejemplo cuando existe un pequeño problema (que se puede convertir en enorme), que genera dudas en el deportista y hace que se autolamente de los fracasos en lugar de buscar soluciones. La diferencia fundamental entre la autoconfianza y la falsa autoconfianza es el realismo; y, como hemos visto, existe una distinción clave entre personas que gozan de autoconfianza y otras que “sufren” la falsa autoconfianza.

Existen otras variables psicológicas que influyen en el rendimiento deportivo, de las que podemos hablar en otra ocasión; aunque sabemos que el confiar (de verdad, recordemos el realismo) es la base de la fuerza mental clave para superar múltiples obstáculos y rendir a máximo nivel. Trabajarla adecuadamente puede ser incluso complicado (las creencias potenciadoras a veces cuesta consolidarlas en nuestro pensamiento y las limitantes muchas veces cuestan mucho de minimizar) dependiendo de las circunstancias, pero el beneficio cuando se desarrolla con eficiencia es obvio.

Por cierto, J compitió a un gran nivel (dentro de sus posibilidades realistas). Estuvo cerca de la marca esperada. Pero lo más importante para él (palabras textuales) es que supo “disfrutar de la experiencia aprendiendo de lo que ocurría y encontrando soluciones a las dificultades encontradas”. Además sintió que dio “el máximo” y se “vació”, recalcando que valoró “muy positivamente la experiencia en la competición”. La autoconfianza de J estaba alta entonces; y también lo está ahora, ya que es capaz de ser realista, valora adecuadamente lo que le ocurre y se plantea objetivos adecuados por los que trabaja “a tope”. Y, “encima”, disfruta “al máximo” de lo que hace."

lunes, 3 de septiembre de 2012

Semana 12/14: Cada vez más cerca

Tal y como preveía la semana anterior, ésta ha sido la de más carga de entrenamientos de toda la preparación, terminando con casi 16 horas y media. Lo mejor de todo es que he acabado vivo a pesar de empezar a sentir un poco el cansancio acumulado de todos estos meses. La verdad es que estoy deseando que llegue el 16 de septiembre para competir en Berga y después aflojar un poco. No es que se me esté haciendo larga la temporada (después del Half aún tengo que tomar alguna que otra decisión importante en cuanto a las competiciones a realizar hasta final de año) pero sí que es verdad que tengo ganas de no estar tan atado a un plan de entrenamiento. Sea lo que sea, esto ya lo tenemos aquí. En menos de dos semanas llega el momento de demostrarme a mí mismo si todas esas sensaciones positivas que llevo tiempo sintiendo se concretan en la competición y consigo el resultado que quiero, que no es otro que bajar de las 5 horas. De momento intento pensarlo lo menos posible (y no obsesionarme, ni mucho menos) pero faltando tan poco cada vez cuesta más. Estas dos semanas tocará trabajar un poco el aspecto psicológico, ser positivo y tratar de visualizar todos los momentos agradables que espero encontrarme en Berga.

Y después de esta introducción, vamos con el resumen del entrenamiento semanal. Como he dicho antes han sido casi 16 horas y media (16h24’ para ser exactos) sumando un total de 8.200m+327,84km+27,16km repartidos así:

Lunes.- 35’45” de rodaje a pie para 8,06km. A pesar del calor, muy cómodo corriendo alrededor de 4’25”/km. Después del rodaje, 4.000 m de natación muy entretenidos con calentamiento, técnica, pull, aletas, manoplas, series de velocidad y enfriamiento. En total, 1h20’55” sintiéndome bastante bien.

Martes.- Salida en bici de 2h56’49” para un total de 91,55 km. A pesar de acumular casi 1.000 m positivos de desnivel y yendo muy tranquilo (sobre todo al principio), terminé a una velocidad media de 31,1 km/h.

Miércoles.- Después de no pisar el tartán de la pista de atletismo desde el mes de octubre del año pasado, volví para hacer series un poco más largas que las que había hecho últimamente. Al final me salió un buen entrenamiento, o eso creo. Este fue el resultado:

20’03” de calentamiento para 4,64 km (a ritmo de 4’19”/km)
Primera serie de 2.000 m en 6’57” (a ritmo de 3’29”/km)
Segunda serie de 1.600 m en 5’31” (a ritmo de 3’27”/km)
Tercera serie de 1.200 m en 4’06” (a ritmo de 3’25”/km)
Cuarta serie de 1.000 m en 3’25” (a ritmo de 3’25”/km)
Quinta serie de 800 m en 2’43” (a ritmo de 3’25”/km)
Sexta serie de 600 m  en 2’00” (a ritmo de 3’20”/km)
Séptima serie de 400 m en 1’15” (a ritmo de 3’10”/km)
10’02” de enfriamiento para 1,86 km (a ritmo de 5’23”/km)
Entre series descansaba 3’ caminando. Al final, 15,05 km más en 1h13’34”.

Ahí van unas fotos de Arancha:






Jueves.- A primera hora de la mañana, 2.200 m de natación en 43’40” y por la tarde 45’ de bicicleta estática (17,33 km), series de abdominales y lumbares y 2.000 m más de natación suave en 43’38”.

Viernes.- Me tocaba descansar pero a última hora de la tarde (con más fresquito que los días anteriores) me dio por salir a rodar un rato. Sólo fueron 19’51” para hacer 4,05 km (ritmo de 4’54”/km).

Sábado.- Salida suave en bici de 1h28’23” para hacer 43,94 km (a 29,8 km/h de media). Fue una salida tranquila para preparar las piernas de cara al día siguiente.

Domingo.- Entrenamiento “estrella” de la semana. Salida en bici de 6h01’54” para recorrer un total de 175,02 km (29 km/h de media y 5.000 m de desnivel acumulado). Parece mentira pero si semanas atrás me quejaba del calor, ayer, sobre todo a primera hora, pasé frío. Vaya cambio de temperatura! Pero eso no fue todo, ni lo peor. Ayer me encontré con un viento muy fuerte que hizo del entrenamiento algo bastante incómodo. Aún así, terminé contento. No forcé en ningún momento y, a pesar del lógico cansancio después de estar 6 horas montado en bici, aún me hubieran quedado fuerzas y ganas para salir a correr un rato. Buena señal de cara al futuro...


En cuanto el peso, tengo que decir que sigo por debajo de los 66 kilos (me estoy manteniendo muy bien) y, si se puede, estos días intentaré perder algo pensando en que la semana que viene, con la carga de hidratos, será normal que recupere algo.

En fin, así ha sido esta semana. Durante estas dos siguientes, lógicamente, habrá un descenso considerable del volumen de entrenamiento para llegar lo más fresco posible a la competición. Además, el viernes tengo hora con Enric, mi fisio, para un buen masaje de descarga. Todo lo que pueda ayudarme, bienvenido sea.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...