Texto extraído del libro de Don Fink "Atletas de Hierro: preparación para el Ironman" (de donde saqué el "original" título del blog) escrito por el autor a principios de 1999. Hace tiempo que lo leí y me resultó interesante:
"De pie al borde de las olas que rompían, pensé: "Ésta va a ser la carrera". Después de tres años de correr en el medio del pelotón, me planteaba situarme entre los tres primeros de mi categoría por edad. Con nervios en el estómago y un nudo en la garganta pensé: "hoy emprenderé el camino hacia el podio".
Bueno, ese era el plan. Sé que suena estúpido. No es tan importante escuchar tu nombre por megafonía y acudir a recibir un premio cutre, pero quería experimentarlo, aunque sólo fuera una vez. Después de todo, nadie practica el triatlón para que le vitoreen. Me gustaba el deporte. Disfrutaba con ese tipo de vida. Me encantaba la emoción de presentarme en una carrera el domingo por la mañana temprano y darlo todo. Después de tres años y más de 20 carreras, sería bonito auparme entre los tres primeros.
Elegí una carrera corta de nivel local que se celebraba todos los años en Jersey Shore. Después de entrenar más intensamente que nunca, me acerqué a la playa aquella mañana preparado para darlo todo. Era el octavo de mi grupo de edad. "Bueno, está bien" pensé. No era tan desilusionante. Mostré alguna mejora y terminé entre los diez mejores. "Después de todo - pensé- corro el triatlón porque me gusta".
Elegí una carrera corta de nivel local que se celebraba todos los años en Jersey Shore. Después de entrenar más intensamente que nunca, me acerqué a la playa aquella mañana preparado para darlo todo. Era el octavo de mi grupo de edad. "Bueno, está bien" pensé. No era tan desilusionante. Mostré alguna mejora y terminé entre los diez mejores. "Después de todo - pensé- corro el triatlón porque me gusta".
Pasaron varias semanas y al volver de trabajar un día cogí el correo y me senté en la mesa de la cocina para leer los resultados de la carrera. Encontré mi nombre en octavo lugar por edades y pasé a mirar el tiempo del tercer lugar. Algo me llamó la atención. Aunque ese corredor estaba cinco puestos por delante de mí, sólo había sido un minuto y 40 segundos más rápido. Hice cálculos con rapidez. Para mi sorpresa, descubrí que su marca era sólo un 1% más rápida que la mía. ¡Sólo un 1%! Me pareció una revelación. Recuerdo que me pregunté: "¿Puedo ser un 1% más rápido?". Lo medité unos segundos y contesté: "Sí, desde luego".
Las ideas revoloteaban en mi cabeza: inscribirme en un curso de natación... asistir a un seminario sobre ciclismo... buscar un nuevo entrenador. Empecé por hacer un lista. Iniciar un programa de entrenamiento de la fuerza... comprar un buen libro sobre nutrición... trabajar la técnica de subidas de cuestas. Las ideas me asaltaban cada vez más rápidamente. De pronto me di cuenta de que, a pesar de haber estado tres años practicando este deporte, sólo había rozado la superficie. Había muchas formas de ser un 1% más rápido, más de las que pudiera apuntar en varias horas.
Las ideas revoloteaban en mi cabeza: inscribirme en un curso de natación... asistir a un seminario sobre ciclismo... buscar un nuevo entrenador. Empecé por hacer un lista. Iniciar un programa de entrenamiento de la fuerza... comprar un buen libro sobre nutrición... trabajar la técnica de subidas de cuestas. Las ideas me asaltaban cada vez más rápidamente. De pronto me di cuenta de que, a pesar de haber estado tres años practicando este deporte, sólo había rozado la superficie. Había muchas formas de ser un 1% más rápido, más de las que pudiera apuntar en varias horas.
En ocasiones soñaba que ganaba el campeonato del mundo en Hawái en mi grupo de edad. Era divertido pero me recordaba lo ridículamente lejano que quedaba ese sueño. Por otra parte, centrarme en lograr una mejoría del 1% era una gran motivación. Era algo tangible. Cuando estás en el valle, las cumbres de las montaña parecen muy lejanas. Lo mejor es olvidarse de las cumbres y centrarse por completo en el siguiente repecho.
Desde que me planteé el concepto de la mejoría del 1% hace muchos años lo he aplicado una y otra vez para mantenerme centrado y motivado. Una vez lograda esa mejoría del 1%, entonces, y sólo entonces, me centro en mejorar otro 1%. Siempre que me he planteado: "¿Puedo ser un 1% más rápido?" nunca me han faltado las ideas. También me di cuenta de que el concepto de la mejora del 1% no se limita al deporte. todo triunfo se inicia con la primera mejora del 1%. Pregúntate de inmediato si puedes ser un 1% mejor en el trabajo, un 1% mejor marido o mujer, un 1% mejor persona. Si la respuesta es "sí" a cualquiera de estas preguntas -y seguramente lo es-, escribe una lista de todas las formas en las que puedes lograr una mejora de un 1%. Luego elige un par de puntos de esa lista y ponte a trabajar. Entra en acción.
Desde que me planteé el concepto de la mejoría del 1% hace muchos años lo he aplicado una y otra vez para mantenerme centrado y motivado. Una vez lograda esa mejoría del 1%, entonces, y sólo entonces, me centro en mejorar otro 1%. Siempre que me he planteado: "¿Puedo ser un 1% más rápido?" nunca me han faltado las ideas. También me di cuenta de que el concepto de la mejora del 1% no se limita al deporte. todo triunfo se inicia con la primera mejora del 1%. Pregúntate de inmediato si puedes ser un 1% mejor en el trabajo, un 1% mejor marido o mujer, un 1% mejor persona. Si la respuesta es "sí" a cualquiera de estas preguntas -y seguramente lo es-, escribe una lista de todas las formas en las que puedes lograr una mejora de un 1%. Luego elige un par de puntos de esa lista y ponte a trabajar. Entra en acción.
Este febrero pasado, muchos años y carreras después de la primera vez que descubrí el concepto de la mejora del 1%, recibí los resultados finales por correo de los Campeonatos del Mundo de 1998 en el Ironman de Hawái. como muchas veces antes, me senté en la mesa de la cocina y repasé los resultados hasta que di con mi nombre. Se pintó el orgullo en mi rostro al recordar que terminé en segundo lugar en mi edad. Fue mi mejor resultado, pero por un momento volví a fantasear sobre lo extraordinario que sería ganar en mi grupo de edad. Ganar la carrera más grande. Miré la marca del ganador y resté la mía. Era un poco más de cinco minutos. Hice cálculos y...¡adivina! Era sólo casi un 1%. Al estirarme a coger lápiz y papel, me pregunté: "¿Puedo ser un 1% más rápido?"."
Hola Ruben, te agradezco que sigas mi blogg, aunque ultimamente lo tengo muy abandonado por los estudios, pero volvere a ello. Mi condromalacia desaparecio aunque hay dias que molesta un poco pero no me impiden hacer el entreno con normalidad, yo estuve 2 meses totalmente parado hasta que encontre la formula, un fisio amigo mio me dijo que fortaleciera cuadriceps sobre todo vasto interno co ejercicios en maquinas, estension de cuadriceps, pero trabajando en rangos de movimieto muy pequeños, e ir alternando con ejercicios de sentadillas a una sola pierna en superficies inestables como puede ser un buso. Yo me dedico al mundo del Fitness por lo que tener al alcance esa maquinaria fue muy facil, lo realizaba tres veces por semana, lo que nunca abandone fue la natacion, ya que no sentia dolor en ningun momento, de echo pertenezco al mejor club de natacion de Murcia y sus entrenos son muy exigentes llegando a nadar 10mil metros en un dia a sesion partida, y la rodilla no se resentia en ningun momento.
ResponderEliminartambien estuve tomando las unas pastillas llamadas condro-sorb, pero vamos, creo que influyen lo minimo.
Cuando hago entrenos muy duros varios dias seguidos me suele molestar, lo que hago es darme un buen masaje y nunca dejar de hacer esos ejercicios de fortalecimiento. Desde entonces todo va perfecto.
Un saludo, y si tienes alguna duda no dudes en preguntar, gracias!!!!
Hola Sergio, muchas gracias por el comentario! La semana pasada empecé a correr de nuevo (también después de dos meses) y de momento la cosa va bien, sin molestias extrañas. Lo del fortalecimiento del cuadriceps (sobre todo vasto interno) ya lo había oido y llevo tiempo trabajándolo en máquinas. Nadando no he sentido molestias en ningún momento, así que estos meses he aprovechado para mejorar algo en el agua y con la bici. La semana que viene tengo traumatólogo para que me de una segunda opinión ya que los síntomas que he tenido y los de la condropatía tampoco me cuadran mucho. A ver que me dice...
ResponderEliminarGracias por los consejos y a seguir entrenando. Un saludo!!!