Buena semana de acumulación de kilómetros a pie. No sé si a estas alturas es mucho o poco (yo lo veo más bien poco a un mes del Extreme Man de Salou) pero aparte de eso, casi nada más. Esto es lo que hay y de momento tengo que conformarme con eso. El brazo sigue sin estar como me gustaría y aún no me he atrevido a meterme en el agua (lo probaré en los próximos días) y, al estar fuera de casa durante los días de fiesta y no tener la bici todavía reparada, tampoco he hecho demasiado rodillo. De todas formas, vamos a intentar ver el vaso medio lleno. De estos últimos días me quedo con los casi 70 km de carrera a pie en cinco sesiones. Ya he dejado atrás las agujetas de la semana anterior y poco a poco el cuerpo se va acostumbrando otra vez a la carga. Los ritmos de los rodajes no han sido altos, ni tan siquiera vivos. Me he limitado a rodar muy cómodo, demasiado y todo en algunos momentos, para intentar volver a ponerme al día lo más rápido posible.
En total han sido casi ocho horas de entreno (7h56’08”). No están mal teniendo en cuenta las condiciones en las que me encuentro, aunque poco a poco parece que la cosa vuelve a tomar forma. Insisto en que voy muy justo de tiempo. El 5 de mayo ya está aquí como quien dice y llevo más de seis semanas sin dar una brazada en el agua ni salir a rodar en bici al aire libre. Confío en mí pero para no engañar a nadie diré que me empiezo a impacientar. A estas alturas ni siquiera tengo una bici con la que salir a entrenar y la cosa va para largo hasta que se resuelva el tema con la aseguradora del conductor que me atropelló. En los próximos días habrá que tomar decisiones de urgencia al respecto porque el tiempo sigue corriendo en mi contra.Y cada vez tengo menos margen.
A todo esto, la 16ª semana de entrenamientos ha quedado así:
Lunes 25/03.- En principio tocaba descanso pero debido a las agujetas y a aquello de que después de una competición es conveniente moverse un poco, me subí al rodillo y pedaleé 30’21” muy suave y apenas sin sudar. Notaba las piernas muy cansadas aún.
Martes 26/03.- Por la mañana, aprovechando que tenía fiesta, salí a rodar por la montaña. Fueron 56’18” por un recorrido entretenido con muchos toboganes. Me salieron 10,89 km a un ritmo medio de 5’10”/km. Por la tarde, 1h00’24” de rodillo en una sesión algo más exigente.
Miércoles 27/03.- Empecé la tarde con 45’11” de rodillo y, después, salí a correr con la intención de hacer una hora. Lo hice y no sin problemas, ya que apenas llevaba tres minutos cuando me torcí el tobillo izquierdo. Tuve que parar unos minutos y me temí lo peor. Al rato intenté probar y vi que podía correr relativamente bien y sin dolor. Sabía que lo peor vendría cuando se enfriara. Al final corrí 1h00’05” y me salieron 11,35 km a un ritmo de 5’17”/km. Fui más lento de lo habitual por precaución. Por la noche, a pesar de no inflamarse demasiado, el tobillo me molestaba bastante y cojeaba.
Jueves 28/03.- Descanso y viaje a Madrid. Estuve cojeando durante toda la mañana aunque a partir de la tarde empecé a notar que el tobillo estaba mejorando mucho, hasta el punto de poder caminar sin ninguna molestia al final del día.
Viernes 29/03.- Rodaje a pie de 1h24’38” bajo la lluvia de Madrid para hacer 17,13 km a un ritmo de 4’56”/km. A pesar de no sentir las piernas ligeras, es verdad que empecé a notar cierto cambio. Quizás ya no pesaban tanto...
Sábado 30/03.- Rodaje suave a pie de 46’40” con la única intención de recuperar piernas y de no cargarme mucho pensando en el día siguiente, cuando tocaba la tirada larga. Fueron 9,04 km a un ritmo medio de 5’10”/km. Después del entreno, excursión a Toledo.
Domingo 31/03.- Buena tirada larga de 19,07 km en 1h32’32” a ritmo cómodo de 4’51”/km. Fue el mejor entreno de la semana en todos los sentidos (distancia, ritmo, duración, sensaciones...), sintiendo las piernas bastante bien. Lo peor del entreno fue que corrí con chubasquero confiando en que caería un diluvio y al final muy nublado pero ni gota.
Y al margen del entrenamiento, tres cosas más. La primera de ellas es que, un año más (ya van cuatro), correré la Cursa dels Bombers de Barcelona que este año será el 21 de abril. Menos mal que me apunté el primer día porque en menos de 20 horas se agotaron las 26.000 inscripciones. Increíble.
La segunda es que esta semana, después de los entrenamientos largos del viernes y del domingo, hice un par de sesiones de recuperación activa (de cuádriceps y gemelos) con el Compex y creo que me fueron bien. A pesar de llevar tantos kilómetros y de pasar de cero a casi setenta en cosa de dos semanas, las piernas enseguida se han acostumbrado. No creo que se me hayan ido las agujetas gracias a él pero supongo que algo habrá tenido que ver.
Y por último, una recomendación, el libro del ultrafondista y chef vegano Scott Jurek “Correr, comer, vivir”. Me lo compré el viernes y de momento me está encantando, y eso que no soy un apasionado de la lectura. En algún momento u otro ya iré escribiendo las cosas que más me están llamando la atención del libro.
Hasta aquí la entrada de hoy. El próximo domingo correré otra clásica, la Cursa de Bràfim-Ermita del Loreto. No llegaré fino pero por lo menos ya llevaré un par de semanas de entrenos en las piernas y, además, tengo ganas de montaña. A ver como va.
No hay comentarios:
Publicar un comentario