El pasado domingo llegaba el turno de disputar el segundo triatlón de la temporada tras el Ironcat, donde no terminé demasiado satisfecho. Se trataba de una competición totalmente desconocida para mí, la cuarta edición del LD San Juan del Flúmen, que se celebraba en la comarca aragonesa de los Monegros. La distancia era un poco "rara" ya que ni era olímpico ni llegaba a half, sino que se trataba de 1,8 km de natación, 72 km en bici (sin drafting) y 14 km corriendo. En cualquier caso, sabía que eran unas distancias que me venían bien (aunque al final me faltó algún kilómetro más a pie) y quería hacer una buena carrera para coger moral y continuar ganando experiencia y quitarme esa especie de mala sensación que me quedó después del Ironcat.
Arancha y yo llegamos a Grañén, a unos 25 km de donde se disputaba la carrera, el sábado sobre las dos de la tarde con el termómetro marcando 34ºC. Una vez allí, tras dejar las cosas y comer, descansamos en el hotel y sobre las cinco de la tarde nos dirigimos a San Juan del Flúmen para recoger el dorsal y el resto del material, ver como estaba montado todo para ir más tranquilos al día siguiente (había dos áreas de transición) y, de paso, estuvimos viendo un rato el triatlón sprint que se celebraba esa misma tarde. El ambiente que había era muy familiar, todo muy accesible, bien organizado, sin aglomeraciones. Creo que en la carrera larga del domingo apenas éramos 300 participantes. Últimamente, con esta fiebre por el triatlón y las grandes carreras, se echan de menos cosas así. Yo reconozco que me gustan las carreras a lo grande aunque también tengo la sensación (por no llamarlo certeza), como muchos de nosotros, que se ha llegado a un punto donde lo que más importa es recaudar (permitiendo la participación de "tropecientos" corredores y poniendo las inscripciones a precios desorbitados) sin tener demasiado en cuenta lo que en realidad es importante, el triatleta. Una vez recogido todo el material, fuimos a Sariñena a cenar algo y de ahí otra vez al hotel a descansar, ya que al día siguiente tocaba madrugar bastante.
El domingo el despertador sonó veinte minutos antes de las seis. Hice un buen desayuno y, sobre las siete menos cuarto salimos en dirección a San Juan del Flúmen. Una vez allí, primero nos dirigimos a la T2, dentro del pueblo, para dejar las zapatillas y la visera y luego a la T1, donde dejé la bici y el resto de cosas. Hasta pocos minutos antes de empezar no decidieron que el uso del neopreno estaría prohibido. Sinceramente, hubiera preferido nadar con él pero, por otro lado, evité tener que ponérmelo, que siempre es un engorro, así que no hay mal que por bien no venga. El circuito de natación consistía en dos vueltas y, como es habitual, tras hacer el reconocimiento visual desde fuera me pareció muy largo. A las ocho y media nos hicieron a todos ponernos al lado de nuestra bici en la T1 y poco a poco nos fueron llamando por número de dorsal para colocarnos en la salida. Las chicas salieron unos minutos antes y, sobre las 8:45, dieron la nuestra. Aquí, lo de casi siempre, muchos golpes y dificultades para nadar al principio y atascos en casi todos los giros. Lo mejor, una temperatura del agua perfecta y que el recorrido, curiosamente, se me hizo muy corto. Las boyas, que desde fuera parecían estar muy lejos, una vez dentro enseguida se alcanzaban. Nadé cómodo, sin forzar demasiado, intentando estirar la brazada y llevar una buena respiración. Al salir del agua en la primera vuelta vi que no iba demasiado mal, llevaba unos quince minutos y pico. Saludé a Arancha y volví a entrar sin perder demasiado tiempo. En la segunda vuelta la cosa estuvo algo más despejada pero siguieron las aglomeraciones en los giros. Al final salí del agua en 31'30" (siete minutos más que el primero), haciendo el parcial 92. Según el Garmin, el tramo de natación fue algo más corto de los teóricos 1.800 metros.
Hice una transición relativamente rápida, teniendo en cuenta que desde la salida del pantano hasta boxes había unos 300 metros. Corrí por el área de transición y adelanté a varios triatletas hasta llegar a la bici, donde me puse dorsal, calcetines y compresivos, zapatillas, gafas y casco y a pedalear. Durante la semana había estado mirando el recorrido en bici y sabía que empezaba en bajada, lo que no imaginaba es que sería un recorrido con continuos toboganes. Apenas hubo un tramo llano, o subías o bajabas, aunque sin desniveles demasiado pronunciados. Durante los primeros kilómetros atrapé a algún grupo pero a lo largo de todo el sector bici perdí más posiciones que gané. No es que fuera lento, al final me salió una media de 33,1 km/h, pero creo que la gente en general es donde mejor preparada está (y cada vez más). Como llevo diciendo ya un tiempo, es aquí donde creo que hay que prestar más atención en mis entrenos. Tengo que trabajar duro sobre la bici ya que es la clave para mejorar mis tiempos finales en carrera, y sobre todo en larga distancia. A pesar de ese recorrido con tanto sube baja, la bici me resultó muy entretenida y me lo pasé bastante bien el rato que duró. Intenté ir acoplado el máximo tiempo posible sin olvidarme de reservar energías para la carrera a pie, mi "fuerte". Al final, terminé el sector bici en 2h14'01" (según mi Garmin) y 2h18'53" de tiempo oficial sumando las dos transiciones, haciendo el parcial 124 (fatal!). Si en la natación me salieron algunos metros de menos, aquí me salieron casi dos kilómetros de más.
Segunda transición muy rápida, apenas tardé un minuto en dejar la bici, cambiarme de zapatillas y ponerme la visera. A esas horas el calor ya apretaba. Había bebido bastante durante la bici pero sólo me había comido una barrita y media. La idea que tenía era salir fuerte y como mucho coger alguna botella de agua durante la carrera, con eso tendría que ser suficiente. Primeros metros por las calles del pueblo y enseguida fuimos a dar a un camino de tierra y piedras. Pasé el primer kilómetro en 3'42" y aprovechando que los dos siguientes fueron de bajada mantuve bien el ritmo, pasando el segundo en 3'38" y el tercero en 3'50". Iba con unas sensaciones buenísimas y a lo largo de esos primeros kilómetros adelanté a un montón de corredores. Acabado el tercer kilómetro, tocaba subir. Sinceramente, no me imaginaba una subida así, digna de cualquier trail. Menos mal que en esa zona había sombra... Como es lógico, durante la subida mi velocidad se resintió mucho pero pasada esta, volví a recuperar un buen ritmo cercando a 4'15"/km. Antes de terminar la primera vuelta, me pasó una cosa curiosa. Iba corriendo a muy buen ritmo al lado de un oficial de triatlón montado en btt y al adelantar a un corredor, este le preguntó al oficial si yo era el primero. Casi! Si no me hubiera faltado una segunda vuelta hubiera estado ahí ahí... Lástima. Terminé la primera vuelta muy entero y llevando un buen ritmo. La segunda no varió demasiado. Mantuve un buen ritmo cercano a 4'/km del octavo al décimo kilómetro (el noveno aún me atreví a hacerlo a 3'53"/km) aunque hice la subida algo más lenta que la de la primera vuelta. Una vez terminada la subida, volví a recuperar ritmo pero empecé a notar que ya no estaba para según que esfuerzos. Aún así, seguía adelantando a corredores, algunos ya caminando. Últimos metros de carrera por unas calles de San Juan de Flúmen con bastante ambiente. La cosa estaba hecha y sabía que bajaría de las cuatro horas con muchísimo margen. Al final, pasé por meta en 3h50'11", terminando en el puesto 74 de 235 llegados a meta (clasificación), y marcando el 22º mejor parcial a pie (59'47"), con lo que calculo que a lo largo de los 14 km y pico adelanté a unos 50 corredores.
En el momento terminé satisfecho pero, sinceramente, me hubiera gustado quedar más arriba en la clasificación. Es verdad que hubo bastante nivel y que todo estuvo muy apretado, pero sigo viendo que cojeo en la natación y hasta en la bici, donde esta vez hice el peor de mis tres parciales. Esto es lo que hay ahora mismo y habrá que seguir trabajando mucho y bien para cambiarlo. Como quien dice la temporada de triatlón está casi empezando y aún tendré varias carreras más para intentar mejorar.
En cuanto a la organización, muy bien en todos los sentidos, desde el precio de la inscripción hasta el trato con los triatletas. Buenos avituallamientos líquidos (los sólidos no los probé), voluntarios muy atentos, fácil acceso a los boxes tanto para entrar como para sacar el material y "barra libre" de fruta y bebida al terminar. Para los "raros" como yo (que ni como bocadillos ni suelo comer bollería), tener toda esa fruta al terminar fue una bendición. Lo único que eché de menos fue una medalla. Ya sé que luego se quedan dando vueltas por casa, pero siempre hacen ilusión. Por lo demás, un 10.
Para terminar, os dejo unas cuantas fotos de Arancha y, como es habitual, los resultados del Garmin.
En los próximos días empezaré a coger la BTT, ya que el próximo 5 de julio estaré en la ViPXtrem, una carrera de 123 km y unos 3.600 metros de desnivel positivo que ya hice en 2011 y que es, simplemente, espectacular. Veremos que tal lo paso en las bajadas y senderos. La idea es divertirme y disfrutar del día, aunque no voy a negar que también quiero hacerlo bien.
Hice una transición relativamente rápida, teniendo en cuenta que desde la salida del pantano hasta boxes había unos 300 metros. Corrí por el área de transición y adelanté a varios triatletas hasta llegar a la bici, donde me puse dorsal, calcetines y compresivos, zapatillas, gafas y casco y a pedalear. Durante la semana había estado mirando el recorrido en bici y sabía que empezaba en bajada, lo que no imaginaba es que sería un recorrido con continuos toboganes. Apenas hubo un tramo llano, o subías o bajabas, aunque sin desniveles demasiado pronunciados. Durante los primeros kilómetros atrapé a algún grupo pero a lo largo de todo el sector bici perdí más posiciones que gané. No es que fuera lento, al final me salió una media de 33,1 km/h, pero creo que la gente en general es donde mejor preparada está (y cada vez más). Como llevo diciendo ya un tiempo, es aquí donde creo que hay que prestar más atención en mis entrenos. Tengo que trabajar duro sobre la bici ya que es la clave para mejorar mis tiempos finales en carrera, y sobre todo en larga distancia. A pesar de ese recorrido con tanto sube baja, la bici me resultó muy entretenida y me lo pasé bastante bien el rato que duró. Intenté ir acoplado el máximo tiempo posible sin olvidarme de reservar energías para la carrera a pie, mi "fuerte". Al final, terminé el sector bici en 2h14'01" (según mi Garmin) y 2h18'53" de tiempo oficial sumando las dos transiciones, haciendo el parcial 124 (fatal!). Si en la natación me salieron algunos metros de menos, aquí me salieron casi dos kilómetros de más.
Segunda transición muy rápida, apenas tardé un minuto en dejar la bici, cambiarme de zapatillas y ponerme la visera. A esas horas el calor ya apretaba. Había bebido bastante durante la bici pero sólo me había comido una barrita y media. La idea que tenía era salir fuerte y como mucho coger alguna botella de agua durante la carrera, con eso tendría que ser suficiente. Primeros metros por las calles del pueblo y enseguida fuimos a dar a un camino de tierra y piedras. Pasé el primer kilómetro en 3'42" y aprovechando que los dos siguientes fueron de bajada mantuve bien el ritmo, pasando el segundo en 3'38" y el tercero en 3'50". Iba con unas sensaciones buenísimas y a lo largo de esos primeros kilómetros adelanté a un montón de corredores. Acabado el tercer kilómetro, tocaba subir. Sinceramente, no me imaginaba una subida así, digna de cualquier trail. Menos mal que en esa zona había sombra... Como es lógico, durante la subida mi velocidad se resintió mucho pero pasada esta, volví a recuperar un buen ritmo cercando a 4'15"/km. Antes de terminar la primera vuelta, me pasó una cosa curiosa. Iba corriendo a muy buen ritmo al lado de un oficial de triatlón montado en btt y al adelantar a un corredor, este le preguntó al oficial si yo era el primero. Casi! Si no me hubiera faltado una segunda vuelta hubiera estado ahí ahí... Lástima. Terminé la primera vuelta muy entero y llevando un buen ritmo. La segunda no varió demasiado. Mantuve un buen ritmo cercano a 4'/km del octavo al décimo kilómetro (el noveno aún me atreví a hacerlo a 3'53"/km) aunque hice la subida algo más lenta que la de la primera vuelta. Una vez terminada la subida, volví a recuperar ritmo pero empecé a notar que ya no estaba para según que esfuerzos. Aún así, seguía adelantando a corredores, algunos ya caminando. Últimos metros de carrera por unas calles de San Juan de Flúmen con bastante ambiente. La cosa estaba hecha y sabía que bajaría de las cuatro horas con muchísimo margen. Al final, pasé por meta en 3h50'11", terminando en el puesto 74 de 235 llegados a meta (clasificación), y marcando el 22º mejor parcial a pie (59'47"), con lo que calculo que a lo largo de los 14 km y pico adelanté a unos 50 corredores.
En el momento terminé satisfecho pero, sinceramente, me hubiera gustado quedar más arriba en la clasificación. Es verdad que hubo bastante nivel y que todo estuvo muy apretado, pero sigo viendo que cojeo en la natación y hasta en la bici, donde esta vez hice el peor de mis tres parciales. Esto es lo que hay ahora mismo y habrá que seguir trabajando mucho y bien para cambiarlo. Como quien dice la temporada de triatlón está casi empezando y aún tendré varias carreras más para intentar mejorar.
En cuanto a la organización, muy bien en todos los sentidos, desde el precio de la inscripción hasta el trato con los triatletas. Buenos avituallamientos líquidos (los sólidos no los probé), voluntarios muy atentos, fácil acceso a los boxes tanto para entrar como para sacar el material y "barra libre" de fruta y bebida al terminar. Para los "raros" como yo (que ni como bocadillos ni suelo comer bollería), tener toda esa fruta al terminar fue una bendición. Lo único que eché de menos fue una medalla. Ya sé que luego se quedan dando vueltas por casa, pero siempre hacen ilusión. Por lo demás, un 10.
Para terminar, os dejo unas cuantas fotos de Arancha y, como es habitual, los resultados del Garmin.
En los próximos días empezaré a coger la BTT, ya que el próximo 5 de julio estaré en la ViPXtrem, una carrera de 123 km y unos 3.600 metros de desnivel positivo que ya hice en 2011 y que es, simplemente, espectacular. Veremos que tal lo paso en las bajadas y senderos. La idea es divertirme y disfrutar del día, aunque no voy a negar que también quiero hacerlo bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario